No quiso Luis Enrique entregarle un hueco en la historia a la primeras de cambio, pero tardó solo 45 minutos en necesitarle. Ansu Fati debía ser el revulsivo de un regreso plano de la selección y el hispano guineano arrasó con otro récord en precocidad. Saltó al campo tras el descanso para sustituir a Jesús Navas, que le dobla la edad, y convertirse en el segundo futbolista más joven en debutar con la absoluta de España.
Lo hizo con 17 años y 308 días, solo 45 más que el vasco Ángel Zubieta, que vistió la camiseta nacional con 17 años y 263 días. Su debut fue en Praga en abril de 1936. 84 años después, un juvenil ha vuelto a ponerse la Roja en partido oficial.
Ansu Fati tumba un récord a cada paso que da en su recién estrenada carrera. En agosto de 2019 se convirtió en el jugador más joven que marcaba en LaLiga. Con 16 años y 304 días desbancó a Olinga (Málaga) y Muniain (Athletic). Ya era el goleador de menor edad del Barça y en el mes de diciembre consiguió serlo también de la Liga de Campeones al marcar en el minuto 85 de un partido ante el Inter con 17 años y 40 días. Anoche, su nombre quedó unido a la historia de la selección nacional, en la que se convirtió en su jugador número 800.